EL DESARROLLO TERRITORIAL DE PORTOVIEJO (2)
El Colegio de Arquitectos insiste en que se aperture el análisis ante la búsqueda de proyectos concertados.
En la continuación del análisis del desarrollo territorial en Portoviejo, desde una opinión profesional y ciudadana debo remarcar criterios de planeación abordando el desarrollo urbano sostenible, desde la formulación de estrategias como ejes de una actuación eficaz. La gestión en áreas verdes y equipamientos se aísla por una visión incompleta, en la que infraestructura de servicio y manejo de estándares son un logro limitado en un esquema de mayor amplitud.
Los equipamientos atraen inversiones en función de alianzas público privadas con el fin de lograr la reactivación habitacional y económica. El GAD Portoviejo afirma disponer de un sistema estructurado en un modelo de gestión que ejecuta el Plan de Desarrollo, no obstante, sin un seguimiento concertado, sin replanteo de prioridades y alejado de una real participación ciudadana, se afecta la gobernanza y lo que realmente se logra es configurar un modelo tecnócrata, anacrónico e intolerante.
Estrategias de planeación en una Agenda dinámica ante eventos adversos son vitales para el “Portoviejo nace de ti”, entre ellas priorizar una renovación urbana en la zona comercial, cambiar el concepto de participación, no considerar al ciudadano como validador de la acción del GAD, sino convertirlo en actor en una dinámica de construcción colectiva. Vincular a los sectores en un foro por la urbe con una estructura de gobierno que permita a gremios, residentes y comerciantes actuar con reglas claras.
En el análisis de la Rotonda y las Vegas, unidos por la calle Ricaurte, el GAD debe prever que los equipamientos no se promueven aislados, sino que en su engranaje debe recuperarse lo afectado. Esto radica en la conjunción de espacios para vivienda, comercio, turismo, la primera como generadora de permanencia y los otros como motor económico.
Ante esto la tildada “regeneración urbana” debe pasar a revisión conceptual y técnica, ya que al cambiar prioridades urge un Plan Parcial de Renovación, en el que vivienda y comercio tengan políticas públicas y soluciones tipológicamente flexibles.
Desde estrategias inteligentes debe fortalecerse el éxito circunstancial de los parques. Se teje la trama urbana desde el polo la Rotonda – UTM, continúa por la Ricaurte, une el Parque de la Madre, la nueva Plaza Comercial Municipal, el Parque central, las Vegas, y se conecta hasta la av. 15 de abril articulando otro polo con el Hospital, y el Centro de Atención ciudadana. En esta estructura derivada del Plan parcial se incorporan viviendas de adecuada densidad y compatibilidad.
La producción de vivienda colectiva fomenta la permanencia y la habitabilidad en zonas adyacentes al corredor equilibrando usos de suelo, esto junto a la revitalización comercial y una propuesta de movilidad que potencie tránsito y transporte.
El Colegio de Arquitectos insiste en que se aperture el análisis ante la búsqueda de proyectos concertados. Los ciudadanos creemos que un nuevo Portoviejo es posible, desde una gestión donde prime el respeto, una visión colectiva y la valoración de la urbe como hecho cultural.